Adenoma sebáceo
- ¿Está Seguro del Diagnóstico?
- Lo que debe estar alerta en la historia
- Hallazgos característicos en el examen físico
- Resultados esperados de estudios diagnósticos
- Figura 1.
- Figura 2.
- Figura 3.
- Confirmación del diagnóstico
- ¿Quién está en Riesgo de Desarrollar esta Enfermedad?
- ¿Cuál es la Causa de la Enfermedad?
- Etiología
- Fisiopatología
- Implicaciones sistémicas y complicaciones
- Opciones de tratamiento
- Abordaje terapéutico óptimo para esta Enfermedad
- Control del paciente
- Escenarios clínicos inusuales a Considerar en el Manejo del Paciente
- ¿Cuál es la Evidencia?
¿Está Seguro del Diagnóstico?
Lo que debe estar alerta en la historia
El diagnóstico de adenoma sebáceo se basa predominantemente en las características patológicas características. El adenoma sebáceo es un tumor benigno poco frecuente de las glándulas sebáceas. Aproximadamente el 70% de las lesiones se desarrollan en la cabeza y la cara, con la nariz y la mejilla más comúnmente afectadas; el 30% de las lesiones se producen en el cuello, el tronco y las extremidades. Los ademomas sebáceos rara vez se desarrollan en las glándulas salivales (glándulas parótidas y submanidulares) y en la mucosa oral. Se han descrito lesiones solitarias y múltiples. Por lo general, son de crecimiento lento, aunque se ha descrito un crecimiento rápido.
La edad media de los pacientes afectados es de 60 años. Las lesiones ocurren tanto en hombres como en mujeres. Una serie de pacientes reportados por la AFIP describieron un predominio masculino, aunque puede haber representado un sesgo de selección.
El reconocimiento de este tumor es crítico, ya que puede estar asociado con el Síndrome de Muir-Torre (SMT). El adenoma sebáceo es la lesión sebácea más común asociada con este síndrome. Las lesiones que se presentan en pacientes con SMT se presentan con mayor frecuencia en el tronco y las extremidades. Otras lesiones cutáneas que se observan en el STM incluyen el epitelioma sebáceo, el carcinoma sebáceo y el queratoacantoma, este último a menudo con características sebáceas.
Hallazgos característicos en el examen físico
En el examen físico, las lesiones son pápulas amarillas, bronceadas, rosadas o de color de piel. Por lo general, tienen menos de 5 mm de diámetro, aunque se han notificado lesiones más grandes (varios centímetros). Pueden producirse hemorragias, úlceras y dolor. A menudo se confunden clínicamente con carcinoma de células basales.
Resultados esperados de estudios diagnósticos
Histológicamente, los adenomas sebáceos son tumores intradérmicos multilobulados y bien circunscritos. Pueden ser contiguos con la epidermis o reemplazarla. Los lóbulos están compuestos de sebocitos maduros (citoplasma vacuolado, núcleo crenado y festoneado) centralmente, rodeados de células basaloides germinativas en la periferia (Figura 1, Figura 2, Figura 3).
Las células germinativas son característicamente más de dos capas y componer menos de la mitad de la célula tumoral volumen. Esta es una característica importante, ya que distingue la lesión del sebaceoma, en el que el componente germinativo representa más de la mitad del volumen de células tumorales. Una pseudocápsula fibrosa suele rodear el tumor. La atipia citológica y las mitosis no suelen estar presentes.
Las tinciones inmunohistoquímicas están disponibles para buscar la pérdida de proteínas reparadoras de desajustes en el tejido embebido en parafina: MSH-2, MLH-1, MSH-6. La pérdida de expresión de estas proteínas está asociada con el MTS. Los estudios iniciales examinaron la expresión de MLH-1 y MSH-2. Más recientemente, también se ha demostrado la pérdida de MSH-6 en pacientes con MTS. El valor predictivo positivo para el diagnóstico de SM cuando se combinan estos tres marcadores oscila entre el 55% y el 100%.
Confirmación del diagnóstico
El diagnóstico diferencial histológico incluye carcinoma basocelular con diferenciación sebácea, sebaceoma e hiperplasia sebácea. El carcinoma de células basales con diferenciación sebácea es fundamentalmente un carincoma de células basales que tiene focos de sebocitos maduros dentro de los lóbulos tumorales. La presencia de parálisis periférica de un tumor predominantemente basaloide con un artefacto de retracción que separa el lóbulo tumoral del estroma adyacente y un estroma mucinoso suelto son indicios de un carcinoma de células basales.
La positividad a CK 19 se notificó como una herramienta útil para diferenciar el carcinoma de células basales de los tumores sebáceos. La fuerte positividad de CK 19 apoya el diagnóstico de carcinoma de células basales. El sebaceoma se distingue del adenoma sebáceo por la presencia de células germinativas que constituyen más de la mitad del volumen tumoral. La hiperplasia sebácea se caracteriza por un mayor número de lóbulos sebáceos maduros que rodean un folículo piloso. El componente germinativo tiene menos de dos capas de espesor, en contraste con un adenoma sebáceo, que tiene más de dos capas de espesor.
¿Quién está en Riesgo de Desarrollar esta Enfermedad?
El adenoma sebáceo a menudo es esporádico, pero puede ser un marcador del síndrome de Muir-Torre (SMM), particularmente cuando las lesiones son múltiples y se localizan en el tronco y las extremidades. El MTS es un defecto autosómico dominante en la reparación de la discordancia del ADN asociado con múltiples tumores sebáceos, queratoacantomas y neoplasias malignas internas. Muestra un ligero predominio masculino (proporción hombre:mujer 3:2). La mediana de edad en el momento de la presentación de la primera neoplasia maligna es de 53 años.
¿Cuál es la Causa de la Enfermedad?
Etiología
Fisiopatología
Se desconoce la causa de la enfermedad esporádica. Los casos asociados con el síndrome de Muir-Torre se deben a un defecto en las proteínas de reparación del desajuste del ADN. Los genes mejor estudiados son MSH-2 en el cromosoma 2, que es el más común, y MLH-1 en el cromosoma 3. Otros genes implicados incluyen MSH – 6 y MLH-3. Estas proteínas funcionan para reparar los desajustes en el ADN. Las mutaciones provocan inestabilidad de microsatélites y tumores. La inestabilidad de los microsatélites también se observa en el cáncer colorrectal hereditario sin poliposis, y el MTS puede ser una variante de esos trastornos.
Implicaciones sistémicas y complicaciones
Los pacientes con síndrome de Muir-Torre tienen riesgo de padecer neoplasias malignas viscerales. De las neoplasias malignas viscerales, el carcinoma colorrectal es el más común. También se han notificado neoplasias malignas genitourinarias, mamarias, gastrointestinales superiores, laríngeas y hematológicas. Aunque las neoplasias viscerales en el STM pueden tener un curso menos agresivo en comparación con sus contrapartes esporádicas, 60% de los pacientes con STM presentan enfermedad metastásica. La mitad de todos los pacientes tienen dos o más neoplasias malignas internas; el 56% de las lesiones cutáneas se diagnostican después de la neoplasia maligna interna; el 22% de las lesiones cutáneas ocurren antes de la neoplasia maligna interna y el 6% son concomitantes.
Opciones de tratamiento
Los adenomas sebáceos son benignos, pero la mayoría de las lesiones se extirpan por completo mediante escisión conservadora local.
Otras terapias notificadas incluyen terapia fotodinámica tópica para lesiones solitarias, aunque no fue muy eficaz. Se ha notificado que la isotretinoína oral estabiliza el número de lesiones nuevas en pacientes con STM. Las dosis utilizadas en los casos notificados oscilan entre 0,85 mg / kg / día y 0,2 mg/kg / día. La duración del tratamiento también ha sido variable, de meses a años, siendo el tiempo más largo notificado con isotretinoína de 4 años. La isotretinoína oral también se ha utilizado en combinación con interferón alfa-2a y gel de isotretinoína. Este último no está disponible en los Estados Unidos.
Abordaje terapéutico óptimo para esta Enfermedad
El tratamiento óptimo de la lesión cutánea es la escisión conservadora.
La evaluación de la posibilidad de MTS es importante y se puede hacer con tinciones inmunohistoquímicas y antecedentes del paciente. Los pacientes con MTS deben someterse a una estrecha vigilancia del cáncer y evaluación de los familiares.
La prueba genética en sangre periférica también está disponible para confirmar la inestabilidad de los microsatélites.
Control del paciente
El seguimiento estrecho de los pacientes con STM es fundamental para evaluar las neoplasias malignas viscerales, en particular las colorrectales y las genitourinarias. Las recomendaciones actuales incluyen exámenes dermatológicos anuales, frotis de papanicolaou cervical, citología urinaria, radiografía de tórax, colonoscopia (cada 3 a 5 años, a partir de los 25 a 30 años de edad), mamografía, biopsia endometrial (cada 3 a 5 años, a partir de los 50 años de edad), endoscopia gastrointestinal superior (en familias con cáncer gástrico reportado) y concentración sérica de antígeno carcinoembrionario (ACE).
Escenarios clínicos inusuales a Considerar en el Manejo del Paciente
Hay varios informes de adenoma sebáceo y SM en pacientes con SIDA. Se notificaron adenomas sebáceos múltiples y carcinoma sebáceo en una paciente con esclerosis múltiple crónica progresiva, aunque no cumplió con los criterios de SM.
¿Cuál es la Evidencia?
Rulon, DR, Helwig, EB. «Neoplasias sebáceas cutáneas». Cancer. vol. 33. 1974. p 82-102. (Artículo de revisión históricamente seminal que examina las características clínicas y patológicas de 95 tumores sebáceos diagnosticados en la AFIP).
Eisen, DB, Michael, DJ. «Lesiones sebáceas y sus síndromes asociados: parte I». J Am Acad Dermatol. vol. 61. 2009. p 549-60. (Artículo de revisión centrado en las características clínicas e histológicas del SMM, el síndrome de Lynch y el síndrome de nevo sebáceo lineal.)
Zare-Mahmoodabadi, R, Salehinejad, J, Saghafi, S, Ghazi, N, Mahmoudi, P, Harraji, A. «Adenoma sebáceo de la glándula submandibular: reporte de un caso». J Sci Oral. vol. 51. 2009. p 641-4. (Caso único que reporta un adenoma sebáceo en la glándula submandibular de una mujer de 38 años de edad.)
Heyl, J, Mehregan, D. «El patrón de inmunomarcado de la expresión de citoqueratina 19 puede distinguir los tumores sebáceos de los carcinomas de células basales». J Cutan Pathol. vol. 35. 2008. p 40-5. (La positividad a CK 19 favorece el diagnóstico de carcinoma de células basales sobre otros tumores sebáceos. El carcinoma basocelular mostró una fuerte positividad en 64% de los casos examinados y una positividad focal en 14% de los casos. Se observó positividad focal pero no fuerte en 20% de los adenomas sebáceos, 50% de los epiteliomas sebáceos y 17% de los carcinomas sebáceos.)
Abbas, O, Mahalingam, M. «Neoplasias sebáceas cutáneas como marcadores del síndrome de Muir-Torre: un algoritmo diagnóstico». J Cutan Pathol. vol. 36. 2009. p 613-9. (Los autores revisan la importancia y el papel de las tinciones inmunohistoquímicas para la inestabilidad de microsatélites en el diagnóstico de SM y proponen un algoritmo para el diagnóstico histopatológico de posibles SM en tumores sebáceos de piel.)
Akhtar, S, Oza, KK, Roulier, RG. «Multiple sebaceous adenomas and extraocular sebaceous carcinoma in a patient with multiple sclerosis: case report and review of literature». J Med Cutan Luchando vol. 5. 2001. p 490-5. (Este es un informe de una mujer de 44 años con esclerosis múltiple progresiva crónica que desarrolló múltiples adenomas sebáceos y carcinoma sebáceo en el cuero cabelludo. No tenía antecedentes de neoplasias malignas internas, aunque tenía antecedentes familiares sólidos de neoplasias malignas viscerales, como colon, útero, vejiga y riñón. Los autores afirman que no cumplía con los criterios de SM, aunque no se le realizaron pruebas genéticas en tejido o sangre periférica.)
Frantz, S, Greiner, A, Schoen, C, Langmann, P, Klinker, H. «Un tumor sebáceo en un paciente con síndrome de inmunodeficiencia adquirida». Eur J Med Res.vol. 7. 2002. p 135-7. (Este es un informe de un adenoma sebáceo de rápido crecimiento en un paciente con SIDA.)
Kim, SK, Lee, JY, Kim, YC. «Tratamiento del adenoma sebáceo con terapia fotodinámica tópica». Arch Dermatol. vol. 146. 2010. p 1186-8. (Dos pacientes con adenomas sebáceos se tratan con TFD tríada. Ambas lesiones estaban en la cara. Un paciente había fracasado al tratamiento previo con láser. Ambos pacientes solo tuvieron respuesta parcial a la TFD.)
Ponti, G, Ponz de Leon, M. «Síndrome de Muir-Torre». Lancet Oncol. vol. 6. 2005. p 980-7. (Este artículo de revisión describe la epidemiología, las características clínicas y la biología molecular del síndrome de Muir Torre. Explora la relación del síndrome de Lynch con el síndrome de MTS y detalla el manejo y el seguimiento adecuado de las personas con síndrome de Lynch.)
Graefe, T, Wollina, U, Schulz, H, Burgdorf, W. «Síndrome de Muir-Torre—el tratamiento con isotretinoína e interferón alfa-2a puede prevenir el desarrollo de tumores». Dermatología. vol. 200. 2000. p 331-3. (Un hombre de 57 años de edad con MTS fue tratado con una combinación de gel de isotretinoína tópica, isotretinoína oral e interferón alfa-2a, lo que resultó en una marcada disminución de la incidencia de nuevos tumores cutáneos.)
Spielvogel, RL, DeVillez, RL, Roberts, LC. «Oral isotretinoin therapy for familial Muir-Torre syndrome» (en inglés). J Am Acad Dermatol. vol. 12. 1985. p 475-80. (Isotretinoína Oral se informó a ralentizar la aparición de nuevos tumores cutáneos en dos pacientes con MTS.)