Prostaglandina E2
Las prostaglandinas son compuestos similares a hormonas que se producen en la mayoría de los tejidos animales. Fueron descubiertos de forma independiente en el líquido seminal en 1935 por el fisiólogo sueco y Premio Nobel Ulf von Euler y el fisiólogo británico M. W. Goldblatt.
En 1962, el bioquímico sueco Sune Bergström, otro premio Nobel, y sus compañeros de trabajo identificaron la prostaglandina E2 (PGE2) en el tejido de la vesícula seminal de las ovejas. Según el Índice Merck, la PGE2 «es la prostaglandina de mamíferos más común y más biológicamente activa.»En los años siguientes, el PGE2 fue sintetizado en el laboratorio, primero como una mezcla racémica (1969-1970) y poco después como el isómero natural (–).
PGE2 tiene varios usos médicos, principalmente durante el parto y en recién nacidos. La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos aprobó su uso en 1977; los usos incluyen inducir el trabajo de parto, prevenir el sangrado posparto y mantener cerrado el conducto arterioso en bebés con defectos cardíacos congénitos.
El cuerpo libera prostaglandinas, incluida la PGE2, como respuesta inflamatoria a una lesión muscular. Esto suena mal, pero la inflamación activa las células madre musculares que reparan el daño, según la bióloga Helen Blau y su equipo de investigación de la Universidad de Stanford. Descubrieron que el tratamiento de ratones lesionados con PGE2 aceleró la reparación del daño.
Por el contrario, el uso de un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE) como el ibuprofeno o la aspirina inhibió la reparación muscular en ratones. Este cuento con moraleja dice que a veces es mejor dejar el AINE en el estante y dejar que la inflamación haga su trabajo.