Simeón (hijo de Jacob)
Las fuentes rabínicas clásicas argumentan que Simeón era muy intrépido, pero también era particularmente envidioso, por lo que siempre había sido antagónico y rencoroso hacia José, debido a que José era el hijo favorito de Jacob. El libro midráshico de Jaser argumenta que Simeón fue el que propuso que los hermanos mataran a José, y otras fuentes clásicas argumentan que fue Simeón quien arrojó a José a un pozo, y se puso furioso cuando descubrió que Judá había vendido a José en lugar de matarlo. Según las fuentes clásicas, Simeón sufrió el castigo divino por esta inhumanidad, con su mano derecha marchita, pero esto hizo que Simeón se arrepintiera, y así su mano fue restaurada una semana después.
En la narración bíblica de José, cuando José, habiéndose establecido en Egipto, le pide a sus hermanos que le traigan a Benjamín, toma a Simeón como rehén para asegurarse de que regresen. Según fuentes rabínicas clásicas, José eligió a Simeón para ser el rehén porque le preocupaba que si Simeón no se separaba de Leví, entonces Leví y Simeón podrían destruir Egipto juntos, ya que ya habían destruido a Siquem. Otra teoría fue que José singularizó a Simeón debido a que tomó un papel prominente en la traición de José, sin embargo, Driscoll señala que no hay mención de esto en la narración. De acuerdo con el libro midráshico de Jaser, Simeón no estaba dispuesto a convertirse en rehén, por lo que José envió a 70 egipcios fuertes para tomar a Simeón por la fuerza, pero Simeón tenía una voz muy poderosa, y así fue capaz de ahuyentar a los egipcios simplemente gritando. El texto dice que Simeón fue finalmente sometido por Manasés y encarcelado. El Testamento de Simeón, por otro lado, declara que Simeón reconoció que era justo para él ser encarcelado, dado su maltrato anterior a José, y por eso fue voluntariamente.
Según el Libro de los Jubileos, Simeón nació el 21 de Tevet, y según el libro del Génesis tuvo seis hijos. Aunque algunas fuentes rabínicas clásicas argumentan que la madre de sus hijos, y su esposa, era Bonah, una de las mujeres de Siquem, otras fuentes rabínicas clásicas argumentan que la esposa de Simeón (y la madre de sus hijos) era Dina, su hermana, que había insistido en el matrimonio antes de que ella estuviera dispuesta a dejar la casa de Siquem (Siquem era su violador/amante). Muchas de las fuentes rabínicas argumentan que Simeón murió a la edad de 120 años, aproximadamente tres años antes de la muerte de su hermano Rubén, aunque Números Rabá afirma que Simeón se convirtió en el mayor de los hermanos después de la muerte de Rubén.