Estación de Campo de Ecología Urbana
La revista científica internacional, Ecología Urbana, define su disciplina homónima como
» the el estudio de ecosistemas que incluyen seres humanos que viven en ciudades y paisajes urbanizantes. Se trata de un campo interdisciplinario emergente que tiene como objetivo comprender cómo los procesos humanos y ecológicos pueden coexistir en sistemas dominados por el hombre y ayudar a las sociedades en sus esfuerzos por ser más sostenibles. Because Debido a su naturaleza interdisciplinaria y su enfoque único en los seres humanos y los sistemas naturales, el término «ecología urbana» se ha utilizado de diversas maneras para describir el estudio de los seres humanos en las ciudades, de la naturaleza en las ciudades y de las relaciones acopladas entre los seres humanos y la naturaleza. Cada una de estas áreas de investigación está contribuyendo a nuestra comprensión de los ecosistemas urbanos y cada una debe entenderse para comprender plenamente la ciencia de la Ecología Urbana.»
¿Por qué es importante esto?
Una sola generación a partir de hoy, para 2030, la población de las ciudades del mundo crecerá en 2 mil millones de personas más. En la actualidad, aproximadamente la mitad de los seres humanos de la tierra viven en zonas urbanas. En 2030, según el World Factbook de la CIA, el 60 por ciento, o casi dos tercios de las personas, vivirán en ciudades. Además del espacio en el que vivir, todas estas personas necesitarán aire respirable, agua potable y alimentos, que en su mayoría se cultivarán fuera de las ciudades y se transportarán a ellas.
En resumen, todo el planeta se está urbanizando, un fenómeno que ya está teniendo un efecto profundo en los sistemas naturales que mantienen el aire respirable, el agua potable y el suelo fértil para la agricultura.
Pero existen grandes áreas de espacios verdes dentro de las ciudades. Céspedes, parques, campos de golf y reservas naturales creadas hace décadas y ahora rodeadas de desarrollo ayudan a filtrar la contaminación en el aire y el agua, producen oxígeno, mitigan la absorción de calor por el asfalto y el concreto, y proporcionan hábitat para aves cantoras y otra vida silvestre.
En el último cuarto de siglo, los científicos han reconocido que comprender las interacciones de los componentes vivos y no vivos de estos ecosistemas urbanos es vital para el futuro de toda la vida en la tierra, incluidos nosotros mismos.