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Vivir con Rosácea: Signos y síntomas

La rosácea es una afección dermatológica inflamatoria a largo plazo que afecta a aproximadamente 16 millones de personas en los Estados Unidos. Se presenta con más frecuencia en individuos entre las edades de 30 y 60 años y afecta principalmente a mujeres e individuos con piel clara. Sin embargo, esta afección de la piel puede afectar a cualquier persona a cualquier edad y, si no se trata, empeorará con el tiempo. Mientras que las mujeres son más propensas a tener rosácea, los hombres son más propensos a tener casos más graves de rosácea.

Los signos y síntomas de la rosácea pueden variar en tipo y grado de gravedad de un individuo a otro. La rosácea causa enrojecimiento o enrojecimiento de la piel alrededor de las mejillas, la nariz, la barbilla, la frente y, a veces, los párpados. Las personas con rosácea también pueden tener protuberancias rojas elevadas que se asemejan al acné y pueden presentar una nariz hinchada roja.

Durante el curso de la rosácea, los pacientes experimentan brotes y períodos de remisión. Más del 50% de las personas con rosácea tienen problemas oculares como sequedad, ardor, exceso de lagrimeo e inflamación de los párpados. Los ojos también pueden volverse sensibles a la luz u otros problemas visuales.

¿Qué Causa la Rosácea?

Aunque todavía se desconoce la causa exacta de la rosácea, sí implica la hinchazón de los vasos sanguíneos justo debajo de la piel. Algunas investigaciones sugieren que la rosácea puede ser hereditaria o estar relacionada con el sistema inmunitario. La investigación también sugiere que la rosácea puede estar vinculada a la bacteria Helicobacter pylori, que es responsable de la enfermedad de úlcera péptica. Su médico puede diagnosticar fácilmente la rosácea examinando su piel y haciéndole preguntas sobre sus síntomas y antecedentes médicos. Se han identificado factores o desencadenantes que pueden empeorar la rosácea.

¿Cómo Se Trata la Rosácea?

Si bien no hay cura para la rosácea, un dermatólogo puede tratarla y manejarla de manera efectiva. El tratamiento primario implica evitar los desencadenantes conocidos.

Para prevenir las crisis asmáticas, se recomienda usar protector solar a diario para proteger la piel. El tratamiento se individualiza en función de los síntomas del paciente y puede incluir terapia antibiótica oral y tópica. A veces, los médicos optan por usar la terapia de la piel con láser para mejorar la piel.

Las personas con rosácea ocular también deben consultar a un oftalmólogo para una evaluación y tratamiento adicionales si es necesario. La mayoría de los pacientes que tienen rosácea ocular se tratan con antibióticos o gotas oftálmicas esteroides. Su proveedor de atención médica primaria determinará qué tratamiento es el mejor para usted.

Conclusión

Si sospecha que tiene rosácea, es importante que obtenga un tratamiento temprano. Si no se trata, la rosácea puede causar daño irreversible, especialmente si los ojos están comprometidos. También es importante usar únicamente limpiadores faciales, lociones y cosméticos hipoalergénicos y no irritantes para evitar la irritación de la piel. Además, evite el uso de productos faciales que contengan alcohol, hamamelis, mentol, menta, aceite de eucalipto o aceite de clavo, y tenga cuidado de secarse, no frotar, el área facial cuando limpie o seque la piel. Cuando sea posible, lleve un diario de síntomas para hacer un seguimiento de los posibles desencadenantes y evítelos cuando sea posible.

Un enfoque colaborativo que incorpore el uso de medidas no farmacológicas y farmacológicas ayudará a tratar y controlar eficazmente la rosácea. La mejor defensa para controlar la rosácea es tener un conocimiento profundo de esta afección y de los factores que desencadenan brotes, y adherirse a su régimen de tratamiento.

La Sra. Terrie es escritora de farmacia clínica con sede en Haymarket, Virginia.