Medias de compresión: ¿cuándo se recomiendan y cómo se utilizan?
A la hora de elegir las medias de compresión hay que tener en cuenta una máxima: la media debe adaptarse a la pierna, y no al contrario.
- Se han de medir los diámetros de la pierna a distintos niveles, así como la longitud, para asegurar la eficacia y la comodidad para el usuario.
- Las mediciones deben tomarse por la mañana para que la pierna no esté demasiado hinchada.
- La compra debe realizarse en una farmacia u ortopedia que garantice una correcta adaptación de las medias.
Es importante seguir ciertos pasos a la hora de ponerse las medias de compresión.
- Sosteniendo la parte de arriba, se enrolla hasta el talón y se introduce el pie hasta donde haga tope.
- Tras colocar el talón, se sube la media desenrollándola hacia arriba.
- Una vez que este puesta habrá que alisar las arrugas.
Puede que colocar las medias llegue a ser costoso. Para que sea más fácil colocarlas se puede aplicar loción en las piernas, usar talco o almidón Usar guantes de goma puede ayudar a ajustar las medias y alisarlas, o incluso se puede recurrir al uso de un calzador para ayudar al deslizamiento de la media por la piel.
Cuidar las medias es imprescindible para que cumplan bien su función. El uso diario de las medias puede afectar a su capacidad de compresión, por eso es recomendable reemplazarlas cada 3 o 6 meses.
Las medias son sólo una parte del tratamiento. Sigue siendo importante mantener un estilo de vida saludable y activo, practicar deportes adecuados: caminar, nadar, andar en bici o cualquier ejercicio que contribuya a favorecer el retorno venoso. Evitar el sobrepeso, disminuir el tiempo que se pasa en una misma postura y restringir el uso de prendas ajustadas y de tacones altos será también muy importante para cuidar las varices.